La invitación corrió a cargo de sapos y princesas que quería presentar su renovada web. Mi contacto con ellos siempre ha sido con su revista cuando la cogía en el cole de las peques. Pero desde ahora tendré su Web en favoritos para consultar, entre otras cosas, qué hacer con las peques ya sea por nuestra ciudad (Madrid) o en otras cuando hagamos alguna escapada familiar.
Supongo que todos sabéis de qué va la película, pero por si hay algún despistado, os resumo la trama. Un niño quiere que sus padres encarguen un hermanito para poder jugar con alguien ya que ellos trabajan desde casa pero le dedican poco tiempo. Son agentes inmobiliarios y están, como los seven eleven (¿todavía existen?), abiertos las 24 horas del día, los 365 días del año. (Por cierto, ¿por qué si los seven eleven nunca cerraban tenían cerraduras en las puertas?).
Como los padres no están muy por la labor de darle un hermanito, se lo pide a las cigüeñas. Pero claro, lo que él no sabe es que se han reciclado laboralmente y ya no reparten bebés, ahora son una gran empresa de mensajería (¿alguien más le viene a la cabeza Amazon?). Así que el lío está formado cuando el mejor repartidor y futuro jefe de las cigüeñas se encuentra con que tiene que llevar el "paquete bebé" sin que se entere su superior y solamente ayudado por una becaria humana.
Yo me sentí identificado en varias partes de la película. Como (sin hacer spoilers) cuando la cigüeña y la becaria tienen que intentar dormir o dar de comer al bebé. O cuando los padres del niño van posponiendo el parar de trabajar y jugar con su hijo. Y, cuando al final lo hacen, se dan cuenta de que es lo mejor que han hecho.
Las voces de doblaje de los personajes principales no rechinan nada. Son Arturo Valls (como Junior, la mejor cigüeña repartidora y futura jefa), Belén Cuesta (como Tulip, la becaria humana), José Luis Gil (como Hunter, el duro jefe de las cigüeñas), José Corbacho (como Toady, una paloma un poco trepa), Christian Gálvez y Almudena Cid (como los padres poco conciliadores entre la vida laboral y la personal) y Juan Ibáñez y Damián Mollá (las hormigas de "El Hormiguero" ahora como un par de lobos).
La película tiene mucho de comedia (en casi todo el metraje. Sobre todo, cada vez que salen los lobos y sus "locos cacharros"), algo de drama (el porque Tulip es becaria de las cigüeñas), un poco de denuncia de la no conciliación (o eso me pareció a mí con la exageración del trabajo de los padres) y una pincelada de normalidad (al mostrar, aunque sea por segundos, varios tipos de familia).
A nosotros cinco nos gustó. Desde la peque de cuatro años hasta Mi Santa (que es la mayor del equipo) se nos podía oír reír durante toda la proyección (sobre todo a mí que según mis peques soy muy escandaloso). Como dato para comprobar que es altamente recomendable, en la sala había niños de todas las edades, incluso más pequeños que mi peque y no hubo en ningún momento ningún ruido ni movimiento extraño que indicara que se estaban aburriendo.
Y nada más. Solo volver a agradecer a madres cabreadas que confiara en nosotros otra vez para un sarao de este tipo y a sapos y princesas por haberlo organizado.
Mi nota es tres con setenta y cinco ángelesdepapi sobre cinco.
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