JUGUETES BÉLICOS

Recuerdo que en el examen de selectividad de la asignatura de inglés nos pusieron un texto que hablaba de los juguetes bélicos y teníamos que comentarlo.

Creo que el texto abría una especie de debate sobre si esos juguetes son buenos para los niños. Mi respuesta fue que yo no veía mal ese tipo de juguetes. Crecí con ellos y me había criado como una persona "normal" (bueno, normal según mi criterio). Siempre recordaré aquel examen, no ya por el tema si no por el pedazo de nueve que me pusieron como nota.

Y, ¿a qué viene este recuerdo? os preguntaréis como lectores sabios que sois (yo sé que lo sois porque me estáis leyendo). Pues a que esta semana se han alineado los planetas de El Papá Cavernícola y de Tang de Naranja para publicar sendos post sobre los dibujos que veíamos y las canciones que cantábamos en nuestra infancia.

Ahora que vemos las cosas con ojos de adulto parece que todo tiene un transfondo. Llega un momento en que nos la cogemos con papel de fumar (¿alguien sabe de dónde viene esta expresión?). Esos dibujos son machistas, o son muy violentos. Esas letras de canciones tienen como misión mantener el heteropatriarcado y el yugo sobre la mujer.

Y yo me niego a analizar todo. Recuerdo que con doce o trece años, me dijeron en verano que eligiera un regalo de una tienda (debí haber sacado buenas notas, algo raro en mí) y yo elegí una ametralladora como la que llevaba Chuck Norris en Invasión USA (peliculón de los ochenta donde las haya). Cuando me la compraron me pasé el verano rodando por el suelo "matando" gente.

Casi toda mi infancia la pasé jugando con He-Man y demás Masters del Universo dándole hasta en el carné de identidad de malvado a Skeletor y secuaces, mis películas favoritas de siempre son las de acción (cuantas más explosiones y disparos mejor) y como he dicho antes, he salido "normal" y nunca me ha dado por salir a la calle a matar a gente real.

No sé, creo que efectivamente, debemos vigilar lo que ven, leen y escuchan nuestros hijos pero sin ser demasiados censores o proteccionistas (sobre todo porque no podemos controlar lo que ven, leen y escuchan sus amigos y compañeros del cole). No tenemos que enarbolar siempre la bandera de lo políticamente correcto. Es más, yo estoy deseando que mis peques sean más mayores para empezar a ver "otro tipo de películas" con ellas (con la de doce ya he visto alguna) como la saga de Alien, El Señor de los Anillos, o Seven etc..