Para nosotros, las dos ediciones del BAF nos las hemos tomado también como un paréntesis en la acelerada vida que llevamos. Las dos veces, hemos aprovechado y nos hemos ido a Barcelona cuatro días para a parte de estrechar lazos con el mundo 2.0, también hacer un poco de turismo.
Tenemos una relación especial con esa ciudad. Estuvimos de novios y después de un pequeño revés en nuestros planes la verdad es que disfrutamos un montón. También estuvimos, por motivos laborables de mi Santa, una semana poco después de casarnos (ahí, el turismo lo hice casi en solitario). Incluso, uno de los mejores recuerdos que guardo de un partido de fútbol también está ligado a Barcelona. Fue en el Camp Nou cuando después de perder la final de copa del Rey contra el Sevilla en el 2010 viví la media hora más grande (si exceptuamos el pasado 17 de Mayo, claro) desde que soy un asiduo a los campos de fútbol.
Pero bueno, centrémonos en el BAF que me disperso. Voy a dividir este post en secciones para que sea más fácil seguirlo:
- VIAJE: El AVE.
En las dos ediciones hemos viajado en AVE y la verdad es que se viaja perfecto. Intentamos coger siempre los billetes de mesa y así estamos todos juntos. En la ida, en la mesa de al lado se sentaron dos parejas y uno de los hombres (me lo dijo mi Santa cuando ya estuvimos en Madrid) comentó "bueno, nos ha tocado al lado de niños". La mujer, que tenía más cabeza le dijo que se relajará, que seguro que no pasaba nada. Es más, por lo visto, luego le comentó ella a él cuando estábamos llegando a Barcelona "ves como se han portado bien...". Que digo yo, que sí, que los niños a veces se pueden poner un poco insoportables, pero son niños, pero a lo mejor, la conversación que llevas tú, también es insoportable y nadie te dice nada, ¡¡¡tío pesado!!!.
Al llegar a la estación de Sants, salimos en busca de (casi del arca perdida) un taxi que fuera grande (éramos cinco, un cochecito y varios bultos) y que encima llevara sillita de bebé. La verdad es que tuvimos suerte, todo esto cuadró con el primero que nos encontramos. El problema fue que era el último de la fila (ni Manolo García ni Quimi Portet, que os conozco) y tuve que acompañarle a preguntar a otros taxis de delante. Al final, ninguno podía llevarnos así que nos quedamos con él.
El taxista fue muy amable. Nos dio la tarjeta de su empresa para que le llamáramos a la vuelta y así no tener otra vez el problema de buscar un taxi como el suyo. En el viaje nos fue contando cosas de la ciudad y nos recomendó, entre otras cosas, que visitáramos el Tibidabo. Pero claro, con el tiempo tan malo, lo dejamos para otra visita.
- ALOJAMIENTO: Erik Vökel
Estuvimos alojados en los apartamentos Erik Vökel situados muy cerca de la Sagrada Familia. Nuestro apartamento constaba de dos habitaciones con cama de matrimonio (una con cuna), dos baños, salón y cocina. La decoración era muy moderna y no le faltaba detalle (horno microondas, lavadora secadora, sofá cama). Acabamos muy contentos con nuestra estancia que incluía también el desayuno en un bar de al lado.
- LUGAR DEL BAF: Valkiria Hub Space
En la primera edición el lugar elegido para la celebración fue la planta baja del Hotel Catalonia Barcelona Plaza. Un lugar no muy espacioso si lo comparamos con el elegido para este año, el Valkiria Hub Space. Un lugar mucho más amplio, con dos plantas puestas a disposición de la organización. Las salas donde se realizaron los distintos talleres y charlas eran relativamente grandes y el lugar completamente diáfano. Todas las marcas tenían su espacio sin tener que pisar a la marca de al lado.
Si tuviera que ponerles un pero sería que hacía frío en las dos plantas (aunque supongo que les pillaría de improviso el cambio de tiempo tan brutal que se dio ese fin de semana).
Tampoco me gustó que en la planta de arriba, en los baños no hubiera cambiador, sobre todo teniendo en cuenta la afluencia de familias con bebés que iba a haber. Tampoco había papeleras donde tirar nada. Donde sí había cambiador era en la planta de abajo, dentro del baño de minusválidos.
- TALLERES / CHARLAS / MARCAS
Yo iba como bloguero consorte, así que no participé de ningún taller ni charla en primera persona. Eso sí, estuve muy atento a dos talleres en los que participaron tanto mi peque mayor y mediana con mi Santa en el que hicieron un calendario de adviento, como otro de scrap en el que mi Santa estuvo haciendo un álbum de fotos.
Entré con mis peques mayores en uno de Nestle en el que supuestamente iban a hacer marionetas, pero al final lo que hicieron fue pintar unas láminas y les dieron unos guantes con un tapón de potito a modo de marioneta. Todo esto para presentar sus nuevas tapas de potitos en los que aparecerán animales y su onomatopeya. Las peques se quedaron un poco plof con este taller.
Las charlas tenían buena pinta pero claro, la peque bebé prefería ir y volver por la planta alta y moverse libre en vez de estar sentada tranquilamente oyendo algo. Así, que para otro año. Eso sí, le encantó el stand de los cochecitos de bebé Cybex. La decoración era genial. La maxicosi colgada del techo la tenía alucinada. Así como los dos peluches gigantes de león y los dos cucuruchos de helado que estaban "caídos" en el suelo.
Eso sí, los papás, deberíamos hacer examen de conciencia de lo que dejamos hacer a nuestros hijos. El domingo, el stand quedó arrasado. Tenían un par de boles llenos de palomitas y nubes y el primer día bien, pero el segundo aquello quedó como si hubiera pasado (nunca mejor dicho) el hijo de Atila. Incluso la maxicosi que estaba colgada, acabó en el suelo. Una cosa es que los dejemos libres y otra que les dejemos sin vigilancia.
Nos hubiera gustado participar el domingo de "SúperMum&Dad" pero había "lista de espera" y no pudimos, pero tenía muy buena pinta.
A mis peques lo que más les gustó fue la biblioteca y sobretodo la cuentacuentos Nela. Hubo un momento que como había pocos niños, la tuvieron para ellas al cien por cien. La verdad es que la chica se ganó el sueldo y a todos los niños que por allí pasaban.
De las marcas hice poco "gasto", fue mi Santa la que las visitó más. Eso sí, nos hicimos la foto de rigor en la granja de Nestlé con el gorro, pañuelo, delantal y demás aparejos. La peque bebé estaba alucinada con el potito gigante que tenían hinchado allí.
Lo mejor fue que, después de hacer una petición vía Twitter en los días previos al BAF, nuestros amigos de tutete.com mandaron unos cuantos chupetes en los que actualizaron su ya famoso "Mi mamá es una Blogger" por el que guardo con mucho cariño "Mi papá es un blogger".
Si tuviera que dar alguna idea a la organización (a toro pasado todo es mucho más fácil) es que teniendo en cuenta que quedaban pocos días para la presentación de la XBOX ONE y la PlayStation 4, hubiera estado bien que hubiera habido un stand para probar ambas consolas.
- EL MUNDO 2.0
Como he dicho antes, una de las grandes razones que tenemos para ir al BAF es afianzar las relaciones 2.0 Mi Santa aprovecha para poner cara a todas esas personas que va conociendo por este mundo bloguero y tuitero o para volver a estar con esas mujeres tan (im)perfectas que se han convertido en alguien muy importante.
Y claro, a mi también me sirve para poner cara a las protagonistas de muchas historias que ella me cuenta. La verdad es que resulta extraño, por ejemplo, estar sentado en la biblioteca, vigilando a la peque bebé y oír a alguien decir "Mira, este es el Santo" y que se te acerque una mujer que nunca habías visto y que te de un fuerte abrazo. Resulta conmovedor ver como hay personas que se recorren unos kilómetros (con toda la familia a cuestas) solo para poder abrazar a otras. Ser testigo de la emoción con la que lo hacen...me sentí un privilegiado.
- TURISMO:
El tiempo no nos acompañó nada. Excepto el viernes, el resto de días estuvo diluviando (el camarero del bar donde desayunábamos nos dijo que no era normal aquella lluvia). Así que no pudimos ver muchas cosas. La tarde pre BAF la dedicamos a pasear. Encontramos cerca de donde nos alojábamos un mercado con una floristería / almacen que estaba preparando todos los adornos navideños y que hicieron las delicias de las peques. Luego bajamos por el Paseo de Gracia viendo la Casa Batlló (la vimos desde fuera, porque el precio era prohibitivo. Estuvimos tentados de meter a la peque bebé que entraba gratis y que luego nos contara, pero desistimos imaginando la que podía liar allí). Llegamos al barrio gótico y pudimos ver la catedral custodiada por una luna llena impresionante. Y cuando la tarde noche empezó a refrescar volvimos al apartamento para coger fuerzas para todo lo que íbamos a vivir en los dos días siguientes.
- CONCLUSIÓN:
Si la hacedora de todo esto monta la tercera edición del BAF, por supuesto que volveremos a estar allí Y ojalá nos lo volvamos a pasar tan bien como en las dos ediciones anteriores.
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