jueves, 14 de febrero de 2013

YA SE FUERON LOS REYES MAGOS...

...Y dejaron un montón de regalos, tantos que mis peques podrían jugar todo el año sin casi repetir juego (sin exagerar).

Lo malo que abriendo tanto paquete y teniendo tanto juguete a veces no valorán todo lo que tienen.

Abren un paquete "Anda, una barbie...dame otro..anda el coche de la barbie...dame otro...". Y así en nuestra casa, y en casa de la abuela, y en casa de la otra abuela, y en la de los tíos...

Y no sé los vuestros, pero mis peques la mayor parte del año acaban jugando a "profes" y lo único que usan son unos folios, unos rotuladores y unos niños imaginarios (que a veces, cuando entro en su habitación me dicen que tenga cuidado de no pisarles. Incluso alguna vez hemos puesto algún plato de más porque se les ha hecho tarde y se han quedado a comer).

Y lo peor no es que reciban tantos regalos, lo peor es lo grandes que son. Este año ha llegado la casa de Barbie y nos podemos dar un canto en los dientes porque no ha sido la de siete pisos, si no la de cinco. (Es tan grande que me estoy planteando mudarme allí).